QUE LA FUERZA TE ACOMPAÑE
“Y yo le pediré a Dios el Padre que les envíe al Espíritu Santo para que siempre les ayude y siempre esté con ustedes……
Los que no creen en Dios y sólo se preocupan por lo que pasa en este mundo, no pueden recibir al Espíritu porque no lo ven ni lo conocen. Pero ustedes sí porque está en medio de ustedes……
El Espíritu Santo vendrá y los ayudará porque el Padre lo enviará a tomar mi lugar…..Él enseñará y recordará todas las cosas y recordará las que Yo os he enseñado.” Juan, XIV, 14 16,18,26
Hace algunos años el cine nos entretuvo con la trilogía “La Guerra de las Galaxias” y todas sus películas. Muchos quedamos asombrados al ver la fe que los caballeros Jedy tenían en “La Fuerza” Pudimos ver el poder y cómo se transformaban en seres luminosos cuando dejaban el cuerpo físicamente. Cuando niño pensaba “que genial sería tener una religión así de poderosa, con una dimensión espiritual y que la gente se despida diciendo “que la fuerza te acompañe”. Este era un tema entre amigos con quienes salíamos a acampar y en una ocasión, uno de ellos que era cristiano nos hizo ver que nuestra Fe en realidad es igual e incluso mucho más poderosa. “Claro- decía – Jesucristo está vivo ya que resucitó de los muertos, pero no está físicamente con nosotros, sino que es el Espíritu Santo quien ocupa su lugar en medio de nosotros.” Cierto, el Espíritu Santo da fuerza, sabiduría y poder a todos aquellos que creen en Jesús. No andamos tan lejos de la película si dejáramos al Espíritu Santo guiar nuestras vidas y así hacer lo correcto, aprender verdades, valores, adquirir valentía, seguridad, responsabilidad, experimentar aventuras positivas y con sinceridad dijéramos al despedirnos en cada ocasión….”que Dios te acompañe” …. ”Que Jesús te guíe”…. “ Que dios te bendiga”.
Tal vez puedas pensar que es una forma de despedirse algo fanática y sólo para los más comprometidos con su iglesia y cosas así, pero eso no es correcto. Si crees en Jesús de corazón, el Espíritu Santo está esperando que le dejes guiar tu vida y será muy normal despedirse diciendo
“que Dios te acompañe..”